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jueves, 29 de marzo de 2007
“Estamos dispuestos a proteger a la población, a combatir el delito y al delincuente. Estamos dispuestos a defender a la juventud, y estamos dispuestos a impedir que la juventud sea desviada por marihuaneros, por toxicómanos, por traficantes. Necesitamos un retén de carabineros en cada población. Necesitamos cientos de carabineros en los límites cordilleranos. Necesitamos defender a Chile del contrabando y a la población de la delincuencia”.
( Mensaje Presidencial del 21 de mayo de 1972, Aporte de Julio Cortés)
“En los EEUU y casi todos los países de Europa central hay más gente en las cárceles que en cualquier dictadura militar mediana. Y en Latinoamérica los escuadrones de la muerte de la economía de mercado matan diariamente a más niños y pobres que a opositores en los peores momentos de represión política. A los excluidos sólo les queda una función social: la del ejemplo aterrador.”
Manifiesto en Contra del Trabajo. Grupo Krisis.
He escuchado a muchos indignados de última hora vociferando en contra de la concertación, los PPD y los socialistas. Eso de hablar en contra de los DC está pasado de moda; y hablar en contra de los radicales hace varias décadas que pasó de moda.
Los argumentos esgrimidos oscilan entre una pobre Bachelet, con un corazón del porte de una casa, ajena a las cuestiones palaciegas; hasta un desgaste de la maquinaria concertacionista que ha permitido el advenimiento de un grupúsculo de bandoleros que intentan redituar con el erario público.
Nadie se refiere al proyecto concertacionista en sí mismo, y en lo idiota que hemos sido por confirmarlos en el poder por tantos años.
Un poco de memoria: A principios de los noventa, Ricardo Lagos Escobar, se dedicó a perfeccionar el modelo privatista de la educación chilena. Su proyecto estrella MECE, se preocupó de igualar hacia abajo dejando a los otrora excelentes liceos santiaguinos (Javiera Carrera, de Aplicación e Instituto Nacional) al nivel del liceo A 593 de Trovolhue. Su excusa, la igualdad. Pero a los ricos los dejó exentos de padecer esa igualdad; ellos podían y pueden educar a sus hijos cómo y dónde quieran. Pueden educar a sus hijos explicándoles que la “píldora del día después” es abortiva, las relaciones sexuales pecaminosas, los condones un principio de comisión de un pecado, y las violaciones a los derechos humanos una consecuencia natural de la crisis a que llevó el país Allende.
Este modelo de educación ha sido causa directa del estancamiento en el ascenso social de nuestro país, un ascenso social individual y burgués pero propio de una sociedad medianamente civilizada.
Los Liceos deficientes hoy no presentan alternativas a los pobres resciliantes; las universidades privadas devaluaron a tal punto los títulos profesionales que ahora volvimos a la pitutocracia pura y simple para conseguir empleo. Los hijos de... siempre tienen una universidad que los acepte y los titule, y como hijos de... obtienen empleos, becas y homenajes. Los pobres que invirtieron en la Universidad se sienten estafados y con justa razón.
Lagos después de sembrar maleza en el MINEDUC pasó al MOP. En obras públicas se dedicó a crear el sistema público- privado que ha sido el padre de obras tan nefastas como la construcción de Cárceles Concesionadas y el Transantiago. El MINEDUC quedó a cargo de Arrate, quien perfeccionó el modelo de Lagos y se lo legó a sus sucesores para que lo administraran.
Cuando postuló a presidente Lagos dijo: “Yo firmo en blanco todo lo que escriba Paz Ciudadana”. De este modo su gobierno se unió explícitamente a la lucha de los ricos en contra de los pobres.
Todo esto sorprendió a muchos. Algunos dijeron que Lagos estaba mal asesorado, que equivocó el camino, que era una táctica electoral. Nada de eso es defendible. Lagos perfeccionó el sistema represivo más fuerte que ha tenido un país “democrático”, justo en el país “democrático” en que existe el sistema de protección social más deficiente.
Pero ese espíritu arribista y autoritario de Lagos ¿es inédito en los socialistas? ¿O es propio sólo de los socialistas renovados?
Casi todos salvan en la meta a los Socialistas levantando la estatua de Salvador Allende, diciendo que son los MAPU y los Socialistas Renovados quienes pudren el cajón de manzanas.
Pero ¿Quién era Allende? Como ha sido canonizado por la izquierda junto con Pablo Neruda es muy difícil criticarlo y no granjearse el odio parido de la izquierda oficial. Pero ese odio parido es irrelevante, importa la nueva izquierda, la que se debe construir por eso digo sin ambages:
Neruda, luego del ser un cafiche de la hormiguita y homenajeado por Stalin, encalilló a Chile por décadas con el METRO de Santiago, el cual obtuvo en carácter de préstamo (o de regalo griego) de los franceses. Ese cacho ha sido administrado por más de treinta años y ha simbolizado el arribismo nacional; hoy recién se lo está utilizando y ha provocado una serie de críticas por su inhumanidad.
Allende, fuera de ser un frívolo, impidió en su gobierno la extradición de Walther Rauff (criminal Nazi acusado de 100.000 homicidios) puesto que éste había sido financista de su primera campaña a Senador.
Si fuera poco, Allende como Ministro de Salubridad de Pedro Aguirre Cerda propuso un proyecto de ley de esterilización masiva en contra de “Locos, Idiotas, Vagos, Delincuentes, Judios, Gitanos y Homosexuales”.
Lagos al menos no está tan lejos de la tradición Allendista, y la Bachelet hoy dirá que fueron los “infiltrados”, los delincuentes químicamente puros, quienes alteran el orden público y se oponen al progreso social, y que utilizará todo la fuerza del Estado para escarmentarlos.
Lo bueno de todo esto es que la izquierda no necesita Santos, Mártires, ni Precedentes. Lo bueno de esto es que no es necesario echar a Lagos y a la Bachelet del panteón de la izquierda, sino que a muchos quienes hoy ostentan la calidad de figuras heráldicas.
Y si de precedentes se trata, los pobres han luchado anónimamente desde tiempos inmemoriales por un mundo mejor, y desde tiempos inmemoriales han sido asesinados por los guardianes del orden. Pero pobres hay de sobra, y los perros amaestrados y sus dueños un día van a dar un paso en falso.
Los argumentos esgrimidos oscilan entre una pobre Bachelet, con un corazón del porte de una casa, ajena a las cuestiones palaciegas; hasta un desgaste de la maquinaria concertacionista que ha permitido el advenimiento de un grupúsculo de bandoleros que intentan redituar con el erario público.
Nadie se refiere al proyecto concertacionista en sí mismo, y en lo idiota que hemos sido por confirmarlos en el poder por tantos años.
Un poco de memoria: A principios de los noventa, Ricardo Lagos Escobar, se dedicó a perfeccionar el modelo privatista de la educación chilena. Su proyecto estrella MECE, se preocupó de igualar hacia abajo dejando a los otrora excelentes liceos santiaguinos (Javiera Carrera, de Aplicación e Instituto Nacional) al nivel del liceo A 593 de Trovolhue. Su excusa, la igualdad. Pero a los ricos los dejó exentos de padecer esa igualdad; ellos podían y pueden educar a sus hijos cómo y dónde quieran. Pueden educar a sus hijos explicándoles que la “píldora del día después” es abortiva, las relaciones sexuales pecaminosas, los condones un principio de comisión de un pecado, y las violaciones a los derechos humanos una consecuencia natural de la crisis a que llevó el país Allende.
Este modelo de educación ha sido causa directa del estancamiento en el ascenso social de nuestro país, un ascenso social individual y burgués pero propio de una sociedad medianamente civilizada.
Los Liceos deficientes hoy no presentan alternativas a los pobres resciliantes; las universidades privadas devaluaron a tal punto los títulos profesionales que ahora volvimos a la pitutocracia pura y simple para conseguir empleo. Los hijos de... siempre tienen una universidad que los acepte y los titule, y como hijos de... obtienen empleos, becas y homenajes. Los pobres que invirtieron en la Universidad se sienten estafados y con justa razón.
Lagos después de sembrar maleza en el MINEDUC pasó al MOP. En obras públicas se dedicó a crear el sistema público- privado que ha sido el padre de obras tan nefastas como la construcción de Cárceles Concesionadas y el Transantiago. El MINEDUC quedó a cargo de Arrate, quien perfeccionó el modelo de Lagos y se lo legó a sus sucesores para que lo administraran.
Cuando postuló a presidente Lagos dijo: “Yo firmo en blanco todo lo que escriba Paz Ciudadana”. De este modo su gobierno se unió explícitamente a la lucha de los ricos en contra de los pobres.
Todo esto sorprendió a muchos. Algunos dijeron que Lagos estaba mal asesorado, que equivocó el camino, que era una táctica electoral. Nada de eso es defendible. Lagos perfeccionó el sistema represivo más fuerte que ha tenido un país “democrático”, justo en el país “democrático” en que existe el sistema de protección social más deficiente.
Pero ese espíritu arribista y autoritario de Lagos ¿es inédito en los socialistas? ¿O es propio sólo de los socialistas renovados?
Casi todos salvan en la meta a los Socialistas levantando la estatua de Salvador Allende, diciendo que son los MAPU y los Socialistas Renovados quienes pudren el cajón de manzanas.
Pero ¿Quién era Allende? Como ha sido canonizado por la izquierda junto con Pablo Neruda es muy difícil criticarlo y no granjearse el odio parido de la izquierda oficial. Pero ese odio parido es irrelevante, importa la nueva izquierda, la que se debe construir por eso digo sin ambages:
Neruda, luego del ser un cafiche de la hormiguita y homenajeado por Stalin, encalilló a Chile por décadas con el METRO de Santiago, el cual obtuvo en carácter de préstamo (o de regalo griego) de los franceses. Ese cacho ha sido administrado por más de treinta años y ha simbolizado el arribismo nacional; hoy recién se lo está utilizando y ha provocado una serie de críticas por su inhumanidad.
Allende, fuera de ser un frívolo, impidió en su gobierno la extradición de Walther Rauff (criminal Nazi acusado de 100.000 homicidios) puesto que éste había sido financista de su primera campaña a Senador.
Si fuera poco, Allende como Ministro de Salubridad de Pedro Aguirre Cerda propuso un proyecto de ley de esterilización masiva en contra de “Locos, Idiotas, Vagos, Delincuentes, Judios, Gitanos y Homosexuales”.
Lagos al menos no está tan lejos de la tradición Allendista, y la Bachelet hoy dirá que fueron los “infiltrados”, los delincuentes químicamente puros, quienes alteran el orden público y se oponen al progreso social, y que utilizará todo la fuerza del Estado para escarmentarlos.
Lo bueno de todo esto es que la izquierda no necesita Santos, Mártires, ni Precedentes. Lo bueno de esto es que no es necesario echar a Lagos y a la Bachelet del panteón de la izquierda, sino que a muchos quienes hoy ostentan la calidad de figuras heráldicas.
Y si de precedentes se trata, los pobres han luchado anónimamente desde tiempos inmemoriales por un mundo mejor, y desde tiempos inmemoriales han sido asesinados por los guardianes del orden. Pero pobres hay de sobra, y los perros amaestrados y sus dueños un día van a dar un paso en falso.
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